Una banca

En estas últimas semanas, intente encontrarme a mi mismo. Buscar una simple respuesta al porque me siento así. Sentía esa sensación de estar feliz sin tener porque estarlo, con la sensación de tenerlo todo sin tener nada o algo tan simple como preguntarse "¿Sigo siendo el mismo?".

Y es que he cambiado, tal vez no para los demás, pero yo lo veo así. Darse cuenta de tus errores, de lo que creíste que estabas haciendo bien cuando no era así, o hasta llegar al punto de dudar de tus virtudes e incluso llegar a pensar que eran debilidades. Era uno de esos momentos "filosóficos" en los que intentas encontrarle el "por qué" a todo.

En medio de esa incertidumbre que me abrumaba, salí a caminar por algunas calles de esta cuidad gris y caótica llamada Lima. Sabía que caminar por las calles aledañas de mi casa no resolverían nada; así que decidí regresar a esas calles que me traían recuerdos del origen del porque me siento así, como para enfrentarme a aquellos pensamientos más directamente y sacarlos desde la raíz.

En plena caminata encontré una banca, decidí sentarme y pensar en todo lo que me pasaba... o bueno, tratar de pensar en algo sobre el tema. Grande fue mi sorpresa, ya que al sentarme en aquella banca de la Av. San Felipe, pude encontrar en tan solo una tarde, las respuestas a lo que tenia en mi cabeza por semanas.

Me di cuenta que no solo era una banca, que ahí había tantas historias como ideas tenia en mi cabeza. Aquella banca, albergaba historias tan comunes en la vida.

Una banca en donde la abuela se pone a tejer una chompa a su primer nieto; los amigos que se sientan a tomar unas cuantas latas de cerveza para contar como les ha ido; los jovencitos que bromean un rato burlándose los unos de los otros; la madre que lee un libro mientras hace dormir a su hija, la pareja de enamorados que discuten por nimiedades o (curiosamente unas cuantas bancas mas a la derecha) la pareja de escolares que recién descubren el amor mediante su primer beso.

Aquellas historias que vi en esa tarde, me hicieron ver que se iniciaba una nueva etapa para algunos y como se cerraban para otros. De que tal vez estos "cambios" son sólo parte de lo que tenga que vivir. Me he dado cuenta de que he cambiado, pero no por ello debo de estar preocupado ni impresionado, ya que la vida trata de eso: cambios. Ya sean buenos o malos, estos cambios sirven para que aprendas de tus errores y sigas adelante, de que asimiles que algunas cosas acaban, pero otras empiezan. Me levanto de esta banca en donde encontré la inspiración que me hacia falta, y después de un minuto se sienta una pareja que da rienda suelta su pasión. Ja! otra historia más para esa banca, otro cambio más que se avecina.

Estoy de regreso a mi casa fumando un cigarro que compre al inicio de la caminata y recibo un mensaje de mi vida pasada. En otras circunstancias me afectaría; pero me alegra saber que ya no es así.

"Si quieres cambiar al mundo, primero cambiate a ti mismo". Mahatma Gandhi

Cambio y fuera.