Las verdades del Reggaetón (si Dios lo permite...)


La innovación es muchas veces el término usado para definir la grandeza de un artista y su aporte al mundo mediante algún factor relacionado a su esencia o la proyección de este; sin embargo, muchas veces esto siempre estuvo ahí, pero él simplemente se encargó de canalizarlo. Partiendo de este concepto, lamento informarles que, la historia en general nos demuestra que la innovación no es algo netamente creado de la nada, sino que se encuentra fuertemente influenciada de algo ya existente y el arte, en todas sus expresiones, no es ajeno a esto. Por consiguiente, la música y varios de sus diversos géneros musicales han nacido de tomar conceptos de algo transformando los mismos a fin de que perduren en el tiempo. El rock, por tomarlo de ejemplo, nació en base a la fusión de géneros ya existentes como el country, blues y el jazz hasta transformarse en los miles de subgéneros que conocemos en la actualidad.

Considerando los factores ya mencionados como el tiempo, fusión de otros géneros y originalidad, es absolutamente cierto que, aunque no les guste a algunos, el reggaetón es un género musical en toda la magnitud de la palabra. Sin embargo, hay algunos conceptos que abundan actualmente y que no necesariamente son ciertos por lo que merecen algunas explicaciones que trataré de resumir en este post. Así que, empecemos:

¿El reggaeton comercial antiguo es mejor al actual?

Si nos basamos en la calidad técnica de las grabaciones y hasta en colaboraciones, no hay ninguna duda que es mucho mejor. No obstante, el gran error que parece perdurable en el tiempo para este género y que es principal motivo de crítica por sus acérrimos adversarios es que las letras cada vez son más banales. No hay ninguna diferencia en la calidad de lo que se dice en el Kulipandeo (2003) con la famosa frase "mámame el hu..." al actual y conocido verso de Safaera de Bad Bunny (2019) "Si tu novio no te mama el cu...". Esto es quizás el talón de Aquiles del género por lo que hace que algunos no lo tomen con seriedad. Es esta última frase lo que genera el siguiente punto y es una de sus principales contradicciones.

¿Puede tomarse con seriedad el reggaeton?

Un gran y rotundo NO. Para ser sincero, porque no está creado para eso. Es totalmente absurdo pretender que una canción de reggaetón te hable de la invasión de ejércitos ingleses a pueblos indígenas americanos como lo hizo "Run to the Hills" de Iron Maiden. Las canciones de este género son creadas en un contexto de fiesta, libertinaje sexual y despreocupación masiva como la que ocurre cuando te estás divirtiendo sin restricción alguna. En todo caso, para los más conservadores, una canción hecha para que la gente baile jamás puede tomarse tan en serio. Es como pretender que "El meneíto" hable de física cuántica y que cada paso cuente la cantidad de átomos del Sodio. Su fin es divertir y, como la esencia de la vida misma, la espontaneidad y alegría no se puede programar o analizar a detalle, debe fluir. Si una canción pretende ser algo muy introspectivo o histórico es muy probable que sea odiada por los fans del género porque "habla de forma aburrida" y por los rockeros porque "no es rock" (existe un odio muy sobredimensionado del cual hablaré más adelante).

Entonces, ¿el reggaeton es solo un payaso de fiesta?

Tampoco es tan así. En los últimos años se han presentado propuestas interesantes en el género sin tener el impacto cultural que pretendían. Propuestas como "YHLQMDG" (Yo hago lo que me da la gana) de Bad Bunny (2019) o "Colores" de JBalbin (2020) son un claro ejemplo. En el primero se trata de rescatar aquel reggaetón "clásico" usando los antiguos samples y en el segundo se sigue un criterio para el nombre de las canciones y concepto del disco. Es precisamente esto último lo que sobresale del resto: se busca hacer un disco conceptual, ya no un conjunto de canciones que puedan sonar en las radios sino un álbum mucho más elaborado. Esto de repente puede sonar a utopía ya que nadie pretende que hagan un "Dark Side of the Moon" (1973) de Pink Floyd de la noche a la mañana, pero ya hay un serio avance de ambos artistas de querer empujar el género más allá. No se puede dejar de mencionar que algunos artistas ya tocan temas mucho más serios en las letras como es el caso de Residente con "René" (aquí) en dónde habla de manera abierta de sus problemas de salud mental. Están lejos la gran mayoría, pero la idea ya está y eso es algo digno de felicitar y de prestar atención a lo que se pueda venir.

¿Por qué los rockeros odian tanto el reggaeton?

Por la misma razón por la que en los 90's algunos puristas odiaban el merengue y la salsa. La mayoría de rockeros deben aceptar que se han quedado estancados en sus pensamientos de una forma tan cerrada como un católico extremista (saludos a los de "Con mis hijos no te metas"). Es tanto su extremismo que apenas sale una nueva banda que toca con estilo clásico y ya es acusada de plagio y de "poca originalidad". El caso más reciente es Greta Van Fleet (¡escucha esto papá!), una banda de chiquillos que no supera los 24 años y que con ya dos discos honra el tan ansiado Rock 'n' Roll crudo que todos pedían, pero es odiado por la sencilla razón de que "se parecen a Led Zeppelin y no son originales". Aún así, si una banda quiere ser "original" y experimentar son también odiados porque "no respeta lo tradicional". Es así que entran a un círculo vicioso innecesario que más parece al de un perro que se muerde la cola y realmente caen mal. No me sorprendería que este concepto haya llegado a los dueños de las discográficas quienes, absolutamente desinteresados de la música y priorizando sus bolsillos, se desentiendan de un mercado tan abrumadoramente exigente pero contradictorio por otro más simple volviéndolo mucho más popular y de fácil acceso a nuevas generaciones como lo es el reggaeton.

Entonces, ¿el rock está muerto?

Otro gran y rotundo NO. Está ahí pero mucho menos popular que hace 10 o 15 años. La última gran banda de rock mundial con tours, actitud y que ha influenciado a las siguientes generaciones fue Oasis (y no lo digo yo por ser fan, hay pruebas tangibles de ello. Click aquí). Desde comienzos de los 2000 y con el ascenso de internet y las diversas plataformas de música, las bandas de rock poco a poco fueron perdiendo la rebeldía. Si bien en la primera década del nuevo milenio nacieron más que interesante propuestas (Sterophonics, Coldplay, The Strokes, etc) estas se fueron apagando sin nunca mostrar mejora. El caso de Arctic Monkeys es quizás el más claro, fueron la eterna promesa que nunca reventó y que solo nos dejo primeros discos sorprendentes, algo por ahí y nada más. Coldplay murió con su disco "Viva la vida" (2005) y prácticamente se dedicó a cantar "oh oh oh" en todos sus coros y priorizar los espectáculos visuales de sus conciertos a generar música en sí, tal como pasa desde hace muchos años con U2.  Ninguna de estas bandas se volvieron imprescindibles en una lista de la historia del género y esa es la dura y lamentable realidad con la que tienen que vivir los amantes del rock: no ha habido ninguna banda en los últimos 15 años que ha roto esquemas, capture y defina una generación como lo hizo Nirvana o hasta Blink 182 (muchas bandas de mediados de los 2000, entiéndase "emo", no existirían si no fuera por ellos). Cosa que muy a su pesar pasa con los artistas de reggaeton ya que muchos adolescentes escuchan su música y se identifican con ella de una u otra forma, tienen contratos con Adidas y Nike y hasta le copian los looks, algo que ya no hace ninguna banda de rock. En tal sentido, se llega a la dolorosa conclusión que es más el odio por la pérdida de lo que alguna vez tuvieron que por la calidad musical en sí. Esto último muy discutible, sin duda alguna.

Volviendo al tema, ¿por qué dices que el reggaeton antiguo no es mejor al actual?

Por la sencilla razón de que vivimos en un mundo cada vez más pegado a la melancolía, de "lo bueno que alguna vez fue", carente de referentes y porque todo se monetiza escandalosamente. Como mencioné en el primer punto, no hay una mejora significativa de la calidad musical en sí, solamente en la producción. Algo así como que la galleta es rancia, siempre será rancia, a nadie le importa que sea rancia pero el empaque es más bonito y la gente lo compra. Asimismo, esos adolescentes del 2003  ahora treintañeros que trabajan, tienen cierto poder adquisitivo, piensan viajar, tener un par de gatos y solo criar máximo un hijo. Bueno, esa misma "promo" añora sus días de libertad e inicio a fiestas por lo que cree que lo que se vivió en su momento fue mejor y marcó tendencia. En consecuencia, se cree e idolatra a dicha música ya que es lo que fue en ese momento porque era su momento, pero realmente no se convirtió en nada más. En tierra de ciegos, el tuerto es rey.

Entonces, ¿Está mal que me guste el reggaeton ya sea antiguo o actual?

Otra vez, NO. En una fiesta es normal bailar esas canciones y hasta divertido dependiendo de que deseas que pase al contornear tu cuerpo a su son. Pero es necesario tener en claro algunos conceptos para no confundirse y hasta endiosar algo que realmente no se merece catalogar en sí. Sencillamente tener los pies sobre la tierra y no hacer tendencia algo que, al final, no se debe hacer. Es muy popular ver en perfiles de redes sociales frases a favor del perreo hasta llegar a niveles tan ridículos de calificarlos como "un estilo de vida" que parten de una broma pero que poco a poco va perdiendo tal concepto. Las cosas en su lugar: Si te gusta lo bailas y ya, pero no pretendan endiosar lo que no llega a ser ni siquiera un milagro.

¿Qué le espera al reggaeton actual?

Les guste o no a sus detractores, el reggaeton es un género musical que ha ganado y seguirá ganando muchos seguidores. Ya cuenta con subgéneros como el trap, por dar un ejemplo, y ha perdurado en el tiempo sabiéndose reinventar al paso del mismo. Tanto es su éxito actual que los artistas anglosajones que alguna vez parecieran inalcanzables para este mercado, son los que desean realizar las colaboraciones con artistas latinos (aquí otro link por si no crees). Además, es tanto el crecimiento que ahora ya no existen unas cuantas artistas féminas del genero, sino muchas y tienen la misma trascendencia y peso artístico que sus colegas. Estamos en tal punto que el artista más famoso del mundo es latino y es nada más y nada menos que Bad Bunny. Su éxito comercial es indiscutible y más ahora, en tiempos cada vez más complejos, su música ha servido hasta para reactivar el negocio del entretenimiento a nivel mundial. Una locura total.

El salto de "la música latina urbana" (por llamarla así) a los mercados mundiales nació irónicamente no de un reggaeton, pero sí participó el pionero del género: Daddy Yankee. Esto puede asumirse como el reconocimiento por parte del destino a alguien que masificó el género a nivel regional con "La Gasolina" (2003) y ahora lo hizo de forma mundial. A continuación, la explicación a lo último mencionado.

"Despacito"

Como "La macarena", "Despacito" marca un antes y después en la música como la tenías conceptualizada hasta aquel entonces. El éxito en la región fue muy alto, pero para nada sorprendente ya que estaba dentro de lo planificado. No obstante, fue la colaboración de Justin Beiber la que la catapultó a la estratósfera haciendo que propios y extraños bailen la canción en cualquier momento, en cualquier día y en cualquier parte del mundo. Es así que varios artistas de habla inglesa empezaron a mirar esta parte del océano pacífico pretendiendo buscar otro "Despacito" que impulse sus carreras y se encontraron con artistas como J Balbin, Nicky Jam, Ozuna, Maluma, etc. Abrieron su panorama y, por ende, las fronteras de la música  fueron destruidas creando un fenómeno mucho más global. Estos artistas ya mencionados son tan conocidos en Los Angeles y Tokio como en Huarmey y no suena a fantasía ya son figuras mundiales que hasta se presentan con Jimmy Fallon (click aquí). Si aún no me crees, artistas con más conocimientos musicales como Ed Sheeran usan "beats" latinos en sus canciones. Míralo aquí.

Conclusiones

- Como sucede con la sociedad actual, la música nos une si está acompañada de alegría. Está bien analizar las cosas; sin embargo, el hacerlo en demasía le quita el real sentido a todo. No lo pienses, si te gusta algo solo hazlo, baila, ríe, llora, ama y disfruta, pero vive y deja vivir. Recuerda: sin juzgar ni sacar los pies de la tierra.

- El rock es un género que merece respeto pero pretenderlo comparar con otros está fuera de lugar. Cada estilo musical tiene lo suyo, su tiempo y sus formas. El pretender desestimar algo solo porque no es de tu agrado te hace tan intolerante como un homofóbico. ¡Pensá! (Ricardo Gareca dixit)

- En los últimos 15 años, no hay una tendencia musical clara y dicha generación se siente algo acéfala. Han habido importantes cambios pero por querer tenerlo todo, no hemos obtenido nada. A diferencia de décadas anteriores, había música, artistas y moda que definía una generación. Hoy, las tendencias se definen por el uso de aplicaciones y/o tecnologías y poner una frase motivadora con hashtags. (#Nomeodien). Irónicamente, la cuarentena en tiempos de pandemia nos ha servido para pinchar algunos globos y que la realidad nos explote en la cara pero eso ya se explicará en otro post.

- No todo tiempo pasado fue mejor y esto aplica al reggaeton "clásico". Tiene lo suyo, sin duda alguna, ha tenido grandes exponentes y te hace recordar buenas épocas, pero no todo tiene la grandeza que se le quiere dar. Y si alguien lo hace así, solo fíjate si hay un interés económico o de cualquier otra índole en ello. Si esto se cumple, están jugando con tu recuerdo. Cabeza fría.

- "Despacito", te guste o no, es un punto de quiebre para la música a nivel mundial ya que nada hubiese cambiado sin la aparición de la canción y mucho menos con la ayuda de Bieber. Culpable o precursor, tú decides cómo calificarlo.
 
Finalmente, es muy probable que haya dejado escapar algunos conceptos y soy muy consciente de ello por lo que todo comentario es bienvenido. Lo que se menciona y pretende en este post no es llegar a emitir un juicio, es poner en la palestra muchas cosas que se ven pero no se mencionan como se deben o se dicen a medias. Están tan de moda las etiquetas, que no quisiera que se me mencione como "opinólogo" ni siquiera como "columnista" porque hay personas que realmente se preparan para ello. Quién hizo esto es "el que tiene un blog" y, como diría Tego Calderón:  "Lo mío es punto y aparte".

Cambio y fuera.


Bonustrack:

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