Entre la arena, whisky y risas

Había terminado de ordenar mis cosas y estaba esperando la medianoche y recibir el 2011 de una manera tranquila. Es en ese momento, me llama un amigo y me invita a acampar a la playa con su grupo de amigos suyos. Como generalmente todos los año nuevo los recibía de la misma manera, pues decidí arriesgarme e irme a la aventura. No conocía a nadie excepto a él, así que como que haría algo emocionante todo.

Desde que estuvimos en el centro comercial con sus amigos comprando las cosas para el campamento, sentí un ambiente cálido y lleno de risas. Fue ahí que empecé a pensar que no había sido mala idea jugármela y pasar año nuevo con gente extraña y que, pues, todo estaba encaminado.

En aquel grupo había una chica que me llamó la atención, no era parte del grupo en sí, pero ya los conocía a todos. De una u otra manera , ella hacia que no me sintiera como el único "nuevo".


Al llegar a la playa y teniendo todo listo para recibir el año nuevo; empezamos a intercambiar algunas palabras.

- "Tengo frío". Dijo ella
- " Yo también... tengo aquí una casaca, no abriga mucho pero por lo menos
es algo, ¿la deseas?"
- " Ok gracias."

Me dijo sonriente mientras se la ponía. No hice eso con gestos de gilero pendejo u con un fin malicioso; como que fue una simple muestra de cortesía. Pero aún así, como que algunas cosas cruzaron por mi cabeza, simplemente pasaron ya que estaba convencido que no las iba a hacer.

Justo cuando estaba conversando con ella y otras chicas del grupo alrededor de la fogata; otra de las tantas chicas propone hacer como una especia de brindis.Levanta la voz y con el brazo al aire con su lata de cerveza dice:

- "Bueno ha sido un año muy largo, que bueno que la pasemos juntos. Y salud
por el SOBRINO QUE SE NOS VIENE, FELICIDADES "CHICA A GO GO" ".

Debo reconocer que aquella extraña situación me hizo sentir ligeramente ridiculizado pero a la vez me hizo reír mucho... de mi mismo.

Una vez bajado del coche de una manera tan brusca como la embestida de una manada de bisontes; decidí, entonces, olvidar las buenas costumbres y llegada la medianoche empezó el desbande de mi "YO" alcohólico.

Recuero algunos pasajes de aquella madrugada, uno de esos pasajes recuerdo que me acerqué a ella con aliento de etiqueta roja y con el cuerpo tambaleándome a causa de la arena y el alcohol, diciéndole de manera trabada y poco legible:

-"Oishe, y el papá de eshe niño.. oshea... shiguuues con él"

A lo que ella me miró y respondió con asco y risa burlona con un categórico:

-"SI, vive por mi casa"

Curiosamente, después de eso, sólo recuerdo pasajes e imágenes borrosas como estar bailando salsa con una de las chicas y verme vomitar a la orilla de la playa luego de estar tomando con sujetos que jamás había visto en mi vida. "Se me apagó la tele", como se dice.

Al día siguiente, desperté en una carpa mientras mis lentes estaban en una y mi mochila estaba en otra. Me sentía muerto y el chico que me ayudó a "desintoxicarme" me dijo:

-"Brooother, que bueno verte despertar. Jajaja"

Llegada la tarde y con el cuerpo descompensado, decidí retirarme a casa. Me despedí de todos con un inmenso "GRACIAS". Lo curioso es que al acercarme a despedirme de ella, ella sólo me dio la mano. Con risa irónica se la dí y decidí retirarme.

Tal vez mi sentido alcohólico hechó a desperdiciar una pequeña posibildad de contacto físico con ella. La verdad, no lo sé y no lo quiero saber. Tampoco sé si la volveré a ver, sólo sé que la pasé bien, tomé como bárbaro, vomité como si fuese de pasar de moda, y terminé satisfecho con una sonrisa imborrable.

Bonita manera de iniciar el año, ¿no?.

Cambio y fuera.