Mar de situaciones
Mientras Fabiola cierra aquella puerta, el taxi pedido por aplicativo avisa que ya se encuentra afuera. Se despide amablemente del portero y el conductor la recibe con una sonrisa mientras le ayuda con las maletas y abre la puerta del asiento trasero. Esa mañana veraniega es testigo de cómo se cierra aquella gran puerta de vidrio con la numeración mientras un familia corre para poder entrar. Antes de partir, Fabiola mira hacia a la ventana de un departamento superior y un niño la saluda sonriente, ella corresponde el saludo para luego ver como un adulto llama al niño. Fabiola sonríe, suelta una lagrima y su auto parte hacia el aeropuerto. José dice "gracias" mientras unos cuantos aplauden y otros se quedan mirándolo seriamente sin decir nada ya que son sus miradas juiciosas los que definen lo que intentan expresar. Es su tercer show en ocho meses, siempre con poquísimas personas y muchas de ellas se van sin siquiera llegar a la mitad de la presentación. Su intento de ser come